¿Porqué buscar herederos?

Las leyes alemanas garantizan el derecho a la herencia.
Así lo estipulan la
» Ley Fundamental (en el artículo 14) en forma general y más detalladamente el » Código Civil en su quinto capítulo.

En la mayoría de los casos los herederos de una persona fallecida son conocidos: o bien existe un testamento o sino los parientes saben quiénes peternecen al grupo de herederos. En todos estos casos no se requiern nuestros servicios; los herederos pueden preparar ellos mismos el pedido de certificado de herederos y acordar la repartición de los bienes a heredar sin que esto tenga que ocasionar litigios entre las personas.

Pero también hay casos, en los que el testamento no tiene validez porque todos los herederos nombrados ya han fallecido previamente. O bien no existe testamento alguno, ni tampoco hijos o nietos, y se desconocen a los demás familiares de la persona fallecida.

En estos casos tiene que actuar el tribunal sucesorio correspondiente (aquel tribunal del último domicilio del causante de la herencia): primero tiene que poner bajo su protección los bienes a heredar y en segundo término empezar la búsqueda de los posibles herederos. Llegado el caso, el tribunal nombra un curador sucesorio, quién debe liquidar la vivienda del fallecido y determinar con cautela todos los bienes a heredar. También le corresponde al curador iniciar la búsqueda de los herederos.

Esta búsqueda puede tomar mucho tiempo y fácilmente desbordar las posibilidades económicas del curador sucesorio. Esto lleva a que se dictamine con demasiada rapidez de que no existen familares que pudieran ser herederos y por consecuencia el Estado hereda los bienes.

Aquel el momento en el cual nosotros empezamos a buscar con más precisión. Nosotros tenemos las posibilidades y el afán de invertir nuestro tiempo en las investigaciones, consultando banco de datos, archivos, literatura genealógica y muchas fuentes más... En muchas casos ésto nos lleva a descubrir a familiares – aún si éstos tienen un parentesco con el fallecido solamente a través de un bisabuelo común. Así Ud. aprovecha de nuestro trabajo, como heredero de un pariente que Ud. desconocía.